miércoles, 30 de octubre de 2013

Tinta impresa, Tinta electrònica

Marta Amaré i Guillamon




Del 9 al 13 d’octubre, s’ha celebrat a Frankfurt la Fira del Llibre 2013, i encara que es podria pensar que el sector travessa una crisi econòmica, ni de bon tros les xifres ho corroboren: al voltant de 7.400 expositors, de prop d’un centenar de països, amb la presentació de 260 títols nous i 300.000 visitants.

Altre cosa ben diferent, és que segons el seu director, Jürgen Boos: “la Fira sigui l’àgora ideal per buscar la solució als jeroglífics amb els que es troba el llibre al segle XXI”. Analitzar el futur de les Biblioteques, el creixent fenomen de l’autoedició, el risc de saturar el possible lector front una massiva oferta i el poder aclaparador de determinades empreses, són alguns dels temes tractats aquests darrers dies a la Fira. Totes aquestes qüestions que en principi sembla que afecten només a la indústria editorial i gràfica, ens acaben repercutint d’una manera o altre a nosaltres, els lectors finals de l’obra. 

Una de les dialèctiques en la que ens trobem avui dia el consumidor de llibres és: Tinta impresa o Tinta electrònica? Per respondre aquesta pregunta, ens plantegem quin tipus de llibre anem a llegir, és d’art o tècnic?, vaig a fer un viatge o el llegiré a la vora del foc un dia plujós?, tinc espai suficient per anar guardant-los o ja em va bé el format digital per no prestar-los i acabar “perdent-los”?. En funció de la resposta de cada persona, ell o ella, faran la seva tria: llibre tradicional o ebook. 

Però de veritat creiem que el públic lector serà el que decidirà si el llibre de paper morirà en un futur proper? El domini dels oligopolis que estan creant normes tècniques que controlen la cadena, no només del comerç electrònic sinó també dels dispositius finals, han aconseguint la retenció del client. 

La lectura és cada cop un fet més social i es converteix en part d’una discussió. La plataforma, StoryDrive, creada al 2010, permet al lector mitjançant una aportació econòmica, estar en contacte amb l’escriptor i poder influir en la línia creativa del autor. Així convertim un consumidor passiu en un que fa funcions de venedor, productor i autor. Aquesta plataforma defensa que: “En 5 anys el llibre de paper morirà i la literatura tindrà una nova pell, perquè la literatura, és immortal”. 

És això el que verdaderament ens hauria de preocupar? Què sigui quin sigui el seu format, la literatura continuï viva? La Fira de Frankfurt mostra el vigor del món editorial a la xarxa però segons la seva portaveu, Katja Böhne, també aposta pels “Llibres Valuosos”, obres amb dissenys artístics i materials exclusius que han demostrat ser productes molt solvents davant els continguts digitalitzats. 

I vosaltres, què en penseu? Resistir-nos al canvi és anar contra l’evolució? Defenseu que les noves tecnologies han d’estar dissenyades per servir a les persones i les seves necessitats i no al inrevés? O sou acèrrims partidaris de tot el que és nou? 

Tinta impresa o Tinta electrònica? Vosaltres decidiu ... o no! 



Tinta impresa, Tinta electrónica

Marta Amaré i Guillamon




Del 9 al 13 de Octubre, se ha celebrado en Frankfurt la Feria del Libro 2013, y aunque se podría pensar que el sector atraviesa una crisis económica, ni mucho menos las cifras lo demuestran: alrededor de 7.400 expositores, cerca de un centenar de países, la presentación de 260 títulos nuevos y 300.000 visitantes.

Otra cosa bien distinta, es que según su director, Jürgen Boos: “la Feria sea el ágora ideal para buscar la solución a los jeroglíficos con los que se encuentra el libro en el siglo XXI”. Analizar el futuro de las Bibliotecas, el creciente fenómeno de la autoedición, el riesgo de saturar al posible lector con una masiva oferta y el poder avasallador de determinadas empresas, son algunos de los temas tratados estos últimos días en la Feria. Todas estas cuestiones que en principio parece que solo afectan a la industria editorial y grafica, nos acaban repercutiendo de una forma u otra a nosotros, los lectores finales de la obra.

Una de las dialécticas con la que nos encontramos hoy día el consumidor de libros es: ¿Tinta impresa o Tinta electrónica? Para responder esta pregunta, nos planteamos que tipo de libro vamos a leer, ¿es de arte o técnico?, ¿voy a hacer un viaje o lo leeré al lado del fuego de un día lluvioso?, ¿tengo espacio suficiente para ir guardándolos o ya me va bien el formato digital para no prestarlos y acabar perdiéndolos? En función de la respuesta de cada persona, el o ella, harán su elección: libro tradicional o ebook.

¿Pero de verdad creemos que el público lector será quien decida si el libro de papel morirá en un futuro cercano? El dominio de los oligopolios que están creando normas técnicas que controlan la cadena, no solamente del comercio electrónico sino también de los dispositivos finales, han conseguido la retención del cliente.

La lectura es cada vez más social y se convierte en parte de una discusión. La plataforma, StoryDrive, creada en el 2010, permite al lector mediante una aportación económica, estar en contacto con el escritor y poder influir en la línea creativa del autor. Así convertimos un consumidor pasivo en uno que hace funciones de vendedor, productor y autor. Esta plataforma defiende que: “En 5 años el libro de papel morirá y la literatura tendrá una nueva piel, porque la literatura, es inmortal”.

¿Es verdaderamente esto lo que nos tendría que preocupar? ¿Qué sea el que sea su formato, la literatura siga viva? La Feria de Frankfurt muestra el vigor del mundo editorial en la red pero según su portavoz, Katja Böhne, también apuesta por los “Libros Valiosos”, obras con diseños artísticos y materiales exclusivos que han demostrado ser productos muy solventes frente a los contenidos digitalizados.

Y vosotros, ¿qué pensáis? ¿Resistirnos al cambio es ir contar la evolución? ¿Defendéis que las nuevas tecnologías han de estar diseñadas para servir a las personas y sus necesidades y no justo al revés? ¿O sois acérrimos partidarios de todo lo nuevo?

¿Tinta impresa o Tinta electrónica? Vosotros decidís, o ¡no! 








3 comentarios:

  1. Es un buen tema, Marta. En el momento en que llega una nueva tecnología nunca se sabe si la anterior se mantendrá o no.

    Yo, con tantas bibliotecas repletas de buenos libros, no dejaré de momento la edición en papel aunque los periódicos ya nunca los leo en ese formato, sino en su edición digital que me permite ver vídeos, enviar enlaces y añadir comentarios.

    En cambio, las revistas me gusta tenerlas en casa, las de decoración sobretodo, ver detenidamente las fotografías en papel.

    Un saludo.

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  3. Gracias Magda por tu participación. Efectivamente, en la reciente Feria de Frankfurt uno de los temas tratados fue el futuro de las Bibliotecas. Si finalmente, el ebook gana terreno al libro impreso, van a tener que tomar muchas decisiones al respecto: digitalizar los fondos existentes, tener ebook propio o usar formatos que se puedan adaptar a cualquier tipo de libro electrónico, que uso dar a las instalaciones si todas las gestiones se realizan vía internet .... ya ves querida Magda, que el tema da para mucho. Aunque particularmente yo creo que cada publicación tiene su formato.

    Marta Amaré

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